¿Qué es R Server?
March 20, 2017Cordis Solutions & myCloudDoor successfully deployed myMasterData into Adveo Group
April 4, 2017Cloud computing ya no es algo novedoso ni revolucionario. Actualmente forma parte del entorno de TI y, de manera más crucial, debería formar parte de los procesos estratégicos y de transformación del negocio. Cloud computing es una pieza tecnológica central para la expansión y crecimiento de los negocios, es la clave y el pilar de las nuevas ventajas competitivas que proporciona la tecnología en cuanto a innovación, agilidad y experiencia de usuario.
Algunos reputados analistas estiman que a finales del 2015, el gasto en tecnologías y servicios de cloud gira en torno al 6-7% del gasto total de TI, una cifra realmente pequeña para las grandes ventajas y beneficios que supone esta nueva forma de consumo de recursos tecnológicos. Pero también la mayoría de estos analistas coinciden en que estamos al final del principio de la era del cloud computing, y que ese porcentaje tiende a crecer de manera exponencial en los próximos años.
La relativamente lenta expansión y transición a la nube tiene que ver con argumentos técnicos y estratégicas, pero también con barreras artificiales, excusas sin fundamento y mucho temor a “lo desconocido”.
Estamos viendo continuamente como empresas jóvenes, más pequeñas y más ágiles, aprovechan todos los recursos que está trayendo la transformación digital, compitiendo con gran éxito con empresas mucho mayores e implantadas desde hace tiempo. Estas corporaciones, más grandes y tradicionales, parecen advertir que su lentitud en adoptar tecnologías más eficientes y su falta de agilidad les está causando pérdida de mercado y falta de competitividad.
Para ayudar a estas empresas que aún son excesivamente cautas a la hora de abordar una transición a cloud, y dar respuesta a las razones técnicas y a las barreras de la adopción derivadas del desconocimiento y la falta de experiencia, surgen nuevos modelos de asesoría, de consultoría y de servicios que pueden ayudar a agilizar la adopción y transición. Entre estos nuevos modelos de servicios destacan MCaaS (managed cloud as a service o nube gestionada como servicio) y CSB (cloud service bróker o brokers de servicios en la nube).
En cuanto MCaaS, es un modelo para proporcionar servicios cloud en el cual el proveedor ofrece la implementación y la gestión completa de los servicios en todos sus niveles y, en algún caso, incluso puede delegar la gestión de alguno de ellos a terceros. El principio general es proporcionar todos los niveles de recursos y soporte para los servicios cloud, en lugar de únicamente lo referido a la implementación o la infraestructura. De hecho, algunos expertos definen las soluciones MCaaS como añadir servicios a la “infraestructura básica”.
[thb_testimonial_parent thb_style=”style2″ thb_pagination=””][thb_testimonial quote=”El principio es proporcionar todos los niveles de recursos y soporte, en lugar de únicamente lo referido a la implementación o la infraestructura”][/thb_testimonial_parent]
Niveles de servicios
De forma resumida, los niveles de servicios que puede proporcionar MCaaS de manera integral comprenderían hasta siete niveles:
- Infraestructura (IaaS), o sea, los servidores, almacenamiento y recursos de red. Puede proporcionarse en nube privada, pública o híbrida.
- Plataforma (PaaS), que puede incluir base de datos, servidor de aplicación, servidor Web o entornos de desarrollo.
- Aplicación, que incluye soluciones o aplicaciones software y, en caso necesario, las licencias de uso. En ocasiones se puede tratar de soluciones SaaS.
- Implementación y/o despliegue, es decir, configurar o implementar las soluciones. Es el más opcional, pues por lo general, requiere conocimientos y experiencia en los sistemas específicos. En este nivel también se incluyen las necesidades de configuración y/o desarrollo de integración de datos y procesos.
- Proceso de negocio, también opcional. Se identifica a menudo como el desarrollo de la interfaz de usuario (web y móvil) y tiene mucha repercusión en cómo se proporciona la experiencia de usuario (internos o externos, clientes o proveedores). Un ejemplo es Fiori para las aplicaciones SAP, o la configuración de la interfaz de usuario en aplicaciones de comercio electrónico multicanal.
- Mantenimiento, que conlleva tanto las operaciones de gestión de los sistemas y aplicaciones, como las actualizaciones, cambios de versión o implantación de nuevas funcionalidades.
- Soporte, que sería el encargado de dar asistencia técnica de nivel 1 y/o 2 (a veces incluso el nivel 3) a los usuarios de los servicios.
La idea detrás de MCaaS es llevar el concepto original de cloud computing un paso más allá. Mientras en un modelo más tradicional, las empresas hacen outsourcing de las operaciones más relacionadas con el hardware o con la plataforma (OS, DB y DEV), con MCaaS también hacen outsourcing de la gestión y soporte de estos sistemas y, en ocasiones, un paso más allá, incluyendo las licencias del software, la implantación y el despliegue de las soluciones e incluso la gestión del proceso de negocio.
MCaaS puede ser algo más costoso, pero las empresas están invirtiendo en este modelo como un modo adicional de innovar a medida que las nuevas metodologías de servicios proporcionados a través de la web están sustituyendo los modelos de instalación de software clásicos. Pero no hay que confundir al proveedor de MCaaS con un Cloud Service Broker (véase Cuadro “Cloud service broker”).
Cuándo tiene sentido
El cloud gestionado proporciona nuevas respuestas al viejo problema del outsourcing. En la economía digital, ya no se vende tecnología, sino aplicaciones o experiencias (de usuario final, de consumidor, de cliente, de socio…). La infraestructura de TI es simplemente un soporte físico cada vez con menos importancia.
Con cloud se difuminan las líneas entre los departamentos de TI y negocio, y fuerza a las empresas a comprometerse en un proceso continuo de innovación y transformación. El cloud gestionado puede ayudar a impulsar la innovación en este nuevo modelo, liberando al departamento de TI de realizar simplemente labores de apagafuegos y de mantenimiento.
Hoy las compañías se enfrentan a la incertidumbre de cómo reaccionar rápidamente y con agilidad al crecimiento, a las nuevas demandas de los clientes y los socios comerciales. Con frecuencia, no cuentan con la experiencia adecuada para llevar a cabo dichos cambios o para evolucionar en lo relativo a su infraestructura actual. Un proveedor, o un socio tecnológico, puede ser de gran ayuda a la hora de gestionar el mantenimiento y el crecimiento en los servicios cloud para responder con la máxima agilidad.
CLOUD SERVICE BROKER
A medida que las organizaciones comienzan imparables la transición de sus EDC (enterprise data centers) hacia modelos basados total o parcialmente en servicios en la nube, crece con fuerza la demanda de especialistas y expertos que conozcan bien cómo provisionar las soluciones cloud óptimas para las empresas, sus necesidades técnicas y sus modelos de negocio. Esto ha llevado a la aparición de CSB, que ayudan en la selección, adopción y transición al cloud: desde la evaluación de proveedores de servicios, a la negociación de contratos y a documentar los entregables de cada uno de los proveedores.
Asimismo, crece con fuerza la tendencia a transformar parte de los servicios de TI tradicionales en auténticos cloud service brokers internos. Dada la capacidad y el conocimiento de los entornos actuales, son los mejores candidatos para evolucionar y ser los especialistas en seleccionar los mejores servicios cloud según las necesidades y requerimientos de sus empresas.
A medida que se expande el modelo cloud y la transformación del centro de datos clásico lo convierte en un modelo híbrido y multi-cloud, crece la complejidad. Con ello, veremos convivir aplicaciones tipo SaaS —a menudo de diferentes proveedores— con aplicaciones a medida en la nube y soluciones tradicionales on–premise. Todo ello va haciendo más complicado la integración, el gobierno TI y, con ello, la gestión de los servicios, el mantenimiento y el soporte. Estas razones impulsan, incluso a las compañías más tecnológicas, a plantearse modelos de nube gestionada donde se liberan total o parcialmente de algunas de las capas de gestión que aportan menos valor añadido al negocio.
[thb_testimonial_parent thb_style=”style2″ thb_pagination=””][thb_testimonial quote=”Con MCaaS se elimina la carga de la gestión, soporte y mantenimiento, pero se mantiene la capacidad de decisión respecto a la innovación”][/thb_testimonial_parent]
MCaaS Vs. outsourcing
de TI, el outsourcing ha sido desde hace muchos años una opción muy utilizada, permitiendo traspasar dichas labores a empresas de servicios acostumbradas a gestionar todos estos retos.
Ahora, al emerger cloud, aparece una opción similar, que permite simplificar tanto a nivel de aplicaciones como a nivel de presupuestos. Seleccionar cuál de las dos posibilidades, y cuándo, será una decisión o un acto de equilibrismo que los CIO tendrán que afrontar.
Actualmente, como concepto más novedoso, la nube genera mucha más expectación que el outsourcing tradicional. De hecho, algunas empresas están mostrando la preocupación en torno a que sus contractos actuales de outsourcing están impidiendo que puedan saltar a cloud y beneficiarse de todas sus ventajas.
Aunque la nube y los servicios cloud gestionados son mucho menos maduros que el outsourcing —que lleva funcionando desde hace unas décadas— propone un cambio mucho más radical, dado que implica la automatización de los procesos en lugar de únicamente pasarle el proceso (a menudo sin ningún cambio) al outsourcer.
Esta diferencia podría ser similar a la que existe entre contratar a un outsourcer para gestionar su ERP customizado e implementado a medida, o reemplazar su sistema ERP on premise con una aplicación estándar en el centro de datos de un proveedor cloud. Pero aunque existen importantes diferencias entre los dos, también es posible ver ambas opciones como parte de una evolución, especialmente a medida que los outsourcers pueden usar ellos mismos las tecnologías cloud como parte de su tool kit de outsourcing.
Dado que los servicios gestionados en cloud tienen poco tiempo de existencia, y pocas referencias aun, las empresas comenzarán a usarlo —en principio— para áreas menos críticas de sus sistemas y aplicaciones. Por ello, no todas las empresas llevarán sus aplicaciones críticas de negocio a la nube; la mayoría implantará una mezcla de ambos modelos en entornos híbridos.
Conclusiones
La nube gestionada como servicio (MCaaS), o los servicios de nube gestionados, es una de las maneras más eficaces para aprovechar las ventajas de los servicios cloud en contextos en los que, de forma interna, no se dispone de la experiencia necesaria para realizar la transición este tipo de tecnologías.
Con este modelo se elimina toda la carga de la gestión, soporte y mantenimiento, pero se queda en los clientes toda la capacidad de decisión respecto a la estrategia en aplicaciones, desarrollo y, en
definitiva, en innovación alineada con los objetivos de las empresas.
En el nuevo escenario digital, MCaaS es un nuevo modelo que evoluciona desde el modelo clásico de outsourcing y que proporciona toda una serie de ventajas:
- Costes operativos (OPEX) en lugar de costes de capital (CAPEX).
- Permite implantar y desplegar más rápido nuevos sistemas y aplicaciones, con la agilidad y la ventaja competitiva que ello supone.
- Es un habilitador de la Innovación.
- Permite cambiar de proveedor sin necesidad de trasladar ningún elemento físico.
MULTI-SOURCING
Un concepto que empieza a oírse cada vez más es el de “multisourcing”. En los próximos años veremos una mezcla de recursos tradicionales manejados mediante outsourcing y recursos gestionados en la nube, que irán ganando terreno a medida que los proveedores de outsourcing son capaces de gestionar estos entornos híbridos.
Se comienza a ver la tendencia en muchas empresas de gran tamaño, que están decidiendo abandonar el outsourcing tradicional. La principal razón es que, con cloud, la tecnología —NO la infraestructura— pasa a ser un elemento clave de la innovación y las empresas quieren retomar el control de esos procesos, dejando las operaciones TI —de nulo o menor valor añadido— a los proveedores de cloud o, en su caso, a los proveedores de MCaaS.